Estoy harto, feminista,
de tu mental deterioro:
El violador no soy yo.
A lo mejor es un moro.
No seas lela, feminista
y aligera mi condena:
El violador no soy yo.
A lo mejor es un mena.
Para el carro, feminista
porque ya me tienes frito:
El violador no soy yo.
A lo mejor es panchito.
Con tu pinta, feminista,
no te toca ni el reintegro.
El violador no soy yo.
A lo mejor es un negro.
J.L. Antonaya