Quiero ver a Martín en el Senado
luciendo blanca toga con salero,
irrumpiendo en ese cagadero
inútil, caro y sobrevalorado.
luciendo blanca toga con salero,
irrumpiendo en ese cagadero
inútil, caro y sobrevalorado.
Quiero ver a Martín en el Senado;
que lo saluden firmes los maderos,
las putas de la sauna, camareros,
traductores y el resto del ganado.
Una camisa azul en el Senado
sería el anuncio de demoliciones
en las sucias tramoyas globalistas.
Quiero ver a Martín en el Senado
señalando a traidores y a ladrones
y lanzando consignas falangistas.
J.L. Antonaya