MENSAJE EN UNA BOTELLA (de gasolina con un trapo)

Deja de aburrirme, progre globalista

con tus tremebundas alarmas climáticas
para asustar viejas de pelo morado
y tontos esféricos que obedecen siempre.

No me cuentes cuentos de "niños famélicos"
cuando te refieres a la invasión sucia
de salvajes torvos de paga y machete.

Y no me acojones con "gripes del mono"
y demás monsergas de vender vacunas.

Ya nadie se traga tu milonga necia
sobre patriarcados y empoderamientos
y por eso ahora exiges censura
para cualquier voz contraria a tu dogma.

A tu sucio dogma de laboratorio
dictado en las logias y en los sanedrines
de usureras mafias multinacionales.

J.L. Antonaya